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REFLEXIÓN DEL 1° DE ENERO 2022 DÍA DE KALPATARU Y AÑO NUEVO 

Hablando de Kalpataru y el árbol que concede los deseos, que deseo tenía la santa Madre?

Servir al Maestro con todo su corazón, mente, cuerpo y alma.

Esto se puso de manifiesto claramente cuando fue a servirlo a Dakshineswar como esposa dedicada.

Hay una frase en las escrituras de la India que dice así

"Paras para Devo Bhava" :

Ver al esposo y esposa, el uno al otro como Dios.

En esa época era común el pensamiento de que la esposa debía considerar al esposo y servirlo como Dios mismo, que hecho increíble que esto se haya convertido en una realidad en toda su expresion o significado, no sólo figurado. Ella sirvió a Dios mismo en persona, y el otro hecho muy raro en este mundo es que la que servía también era Dios mismo, que ejemplo impresionante, maravilloso que esto sucediera de forma simultánea. Por eso Sri Ramakrishna le enseñó a Vivekananda algo que lo dejó estupefacto: el servicio al hombre es Servicio a Dios, uno de los lemas de la orden Ramakrishna, también en esa época no era lo común, significó toda una novedad que los monjes sirvieran a los laicos y no al revés!

Volviendo al tema 

Entonces voy a leer un pequeño párrafo del libro de Swami Gambhirananda 1955 acerca de la Santa Madre dónde nos cuenta cómo lo servía. 

"Hemos seguido los actos de la Madre mientras se movía afanosamente dentro de los recintos de Nahabat contenta con vislumbres del Maestro desde lejos, sabemos que había hecho un agujerito en la puerta desde donde apenas podía vislumbrar algo de lo que sucedía en el cuarto del Maestro con los devotos.  Ese autocontento con su trabajo y la asociación con el Maestro era solo un aspecto de su vida.

Ella vivía en Dakshineswar solo para servir al Maestro meticulosamente, siendo cualquier beneficio personal solo accesorio y nunca su principal objetivo.  Si no fuera así, algún día su mente se rebelaría contra el monótono trabajo pesado y la rígida rutina del Nahabat, y buscaría una manera de escapar de ello."...  

"Queremos delinear los tipos de servicio que ella rindió principalmente al Maestro y, de paso, también a sus devotos... 

"Antes de la llegada de la Madre a Dakshineswar y su dedicación al servicio del Maestro, la vida transcurría sin incidentes con él. Pero cuando hacia el final de sus austeridades severas en sus prácticas espirituales, su poder de digestión sufrió, la Madre apareció en escena como por dirección divina, (en ese entonces Hriday había abandonado las instalaciones del templo, ) y la salud del Maestro mejoró como resultado del servicio más devoto de la Madre, todos estos factores hicieron que el Maestro dependiera cada vez más de ella.  Si por casualidad iba a alguna parte, el Maestro de una manera infantil se sentía impotente y estaba extremadamente ansioso por traerla de regreso. Tal solicitud por parte de alguien que alguna vez estuvo absorto en la experiencia espiritual, puede parecer enigmática para muchos;  pero desde el punto de vista de la Madre, nos damos cuenta fácilmente de que su servicio fue tan exitoso que pudo atraer la atención del gigante espiritual más poderoso que la historia haya presenciado.  La Madre masajeó los pies del Maestro al igual que Lakshmi, sentada a los pies del Señor Narayana;  antes del baño frotó su persona con aceite y le preparó platos nutritivos y apetitosos de acuerdo con su gusto y condición de salud.  En resumen, ella se olvidó de sí misma en él.  Y quizás no era posible incluso para una mente desprendida como la de Sri Ramakrishna ignorar tal servicio consagrado, cuyos ejemplos, como también de la dependencia del Maestro en ella, son numerosos. 

El Maestro tenía el hígado débil.  Entonces la Madre le preparó sopas y curry que eran fácilmente digeribles.  Ahora bien, según la costumbre hindú, una esposa no puede hacerlo durante ciertos días en que su persona se considera impura.  Durante esos pocos días al mes, el Maestro comió todo lo que le vino como prasad, ( comida bendecida) del templo de Kali y sufrió como consecuencia de ello.

Así que un día le preguntó a la Madre: 'Mira, querida, mi problema ha aumentado porque no cocinaste mi comida durante estos días.  ¿Por qué no lo hiciste? 'La Madre explicó:' Las mujeres no pueden cocinar para nadie durante los días de su impureza '.' ¿Quién dice que no pueden? 'Preguntó el Maestro:' Hazlo por mí, tú  no incurrirás en ningún pecado por ello.  ¿Podría explicarme qué parte de su cuerpo es impura: piel, carne, huesos o médula?  Sepa que la pureza y la impureza residen en la mente;  afuera no hay nada impuro. ”Después de eso, la Madre siempre cocinaba para él. El Maestro, muy encantado con esto, dijo:“ Mira, querida, qué sano está mi cuerpo al tomar tus platos.  "