Los Upanishads son textos antiguos de la India, escritos hace más de tres mil años. Forman parte de los Vedas, y tratan sobre las preguntas más profundas:
¿Quién soy? ¿Qué es la realidad? ¿Cómo vivir con sentido?
Toda gran filosofía comienza con una pregunta. ¿Cuál es la naturaleza de la realidad? ¿Cuál es la naturaleza de la conciencia? ¿Y cómo se relaciona una con la otra?
No buscaremos conclusiones definitivas. Haremos algo más importante: establecer un punto de partida sólido. Nos centraremos en dos ideas fundamentales que forman los cimientos de todo el edificio vedántico: primero, el método de los Upanishads, y segundo, el diagnóstico que hacen de la condición humana".
Lo primero que Swami Ranganathananda nos invita a comprender es que los Upanishads no son un libro de mandamientos. Representan una transición monumental en la historia del pensamiento: el paso del ritual a la introspección; de la creencia a la indagación.
Son la porción de los Vedas conocida como Jnana-Kanda, la 'sección del conocimiento'. Su método no es 'cree esto', sino 'investiga esto'. Su pregunta fundamental es radicalmente filosófica: '¿Qué es aquello que, una vez conocido, todo lo demás se vuelve conocido?'
Vivimos en una era de certezas prefabricadas y ruido informativo constante. Se nos dice qué pensar, qué desear, qué temer. La verdadera competencia hoy es por tu atención. El espíritu upanishádico nos ofrece una alternativa revolucionaria: el coraje de volver la mirada hacia adentro. Nos enseña que la verdad más profunda no se encuentra en una autoridad externa, sino que debe ser descubierta a través de una rigurosa y honesta investigación de nuestra propia conciencia. Es una invitación a convertirnos en científicos de nuestra propia experiencia interior".
Segunda Idea Central: El Diagnóstico: Quien soy - El 'Yo' Pequeño y el 'Yo' Real
"Una vez establecido su método —la indagación—, los Upanishads aplican esa herramienta a la experiencia humana. ¿Y cuál es su diagnóstico? Que el origen de nuestro sufrimiento, de nuestra sensación de limitación y ansiedad, proviene de un error de identidad fundamental.
Confundimos lo que realmente somos con lo que no somos. Nos identificamos con lo que el Vedanta llama el 'yo pequeño': nuestro cuerpo, que envejece; nuestras emociones, que fluctúan; nuestro ego, que siempre se siente frágil e incompleto. Este 'yo' condicionado es, por naturaleza, transitorio y vulnerable.
Sin embargo, los Upanishads postulan la existencia de un 'Yo' Real, un centro de conciencia silencioso, estable e ilimitado, que es el testigo impasible de todos los cambios de nuestra mente y cuerpo. Lo llaman el Atman.
Este diagnóstico es más relevante que nunca. La psicología moderna habla del 'ego narrativo'. La sociología habla de “identidades construidas”. Sentimos una presión constante por definirnos a través de lo externo: nuestra profesión, nuestras posesiones, nuestro estatus social. La filosofía upanishádica nos dice que todas estas son máscaras. Y el malestar existencial de nuestra era —esa sensación de que 'algo falta'— proviene de nuestra profunda identificación con estas máscaras, olvidando el rostro real que hay detrás".
Cuatro reflexiones centrales.
1. La unidad de la existencia — Isha Upanishad
El Isha Upanishad dice: “Todo este universo está habitado por lo divino”. No hay separación entre lo espiritual y lo material. Todo es parte de una misma realidad. Solemos vivir fragmentados: trabajo por un lado, familia por otro, espiritualidad en otro rincón. El Upanishad nos invita a integrar, a ver la unidad detrás de la diversidad.
2. El misterio de la conciencia — Kena Upanishad
El Kena Upanishad se pregunta: ¿Qué impulsa a la mente a pensar?¿Qué hace que los ojos vean? ¿Qué fuerza hay detrás de cada acto?
La respuesta es que, detrás de todo, hay un principio consciente. Ese principio no puede ser visto como objeto, porque es el sujeto mismo: la conciencia.
Hoy la ciencia nos da mucho conocimiento del mundo externo pero los Upanishads nos recuerdan: también necesitamos mirar hacia adentro.
3. La elección de Naciketas — Katha Upanishad
El Katha Upanishad cuenta la historia del joven Naciketas. Él se encuentra con Yama, el dios de la muerte y le pregunta: ¿qué sucede después de morir? Yama le ofrece placeres, riquezas, larga vida pero Naciketas rechaza todo eso. Quiere solo la verdad del alma inmortal.
La enseñanza es clara: Cada día tenemos la misma elección. Entre lo placentero y lo bueno. Entre lo fácil y lo verdadero.
4. El conocimiento superior y el inferior — Mundaka Upanishad
El Mundaka Upanishad distingue dos tipos de conocimiento: El inferior: ciencias, artes, información. El superior: la sabiduría del eterno Ser.
No niega el valor de la información pero nos dice: sin sabiduría, todo queda incompleto. Vivimos en la era de la información. Estamos rodeados de datos. Lo que necesitamos es dirección. Necesitamos sabiduría para usar ese conocimiento.
Conclusión: el método upanishádico es la indagación valiente, y su diagnóstico: el dilema humano proviene de una identidad equivocada.
Esto, naturalmente, nos deja en el umbral de las preguntas más cruciales: Si no soy este 'yo' pequeño y ansioso, ¿quién soy? ¿Cuál es la naturaleza exacta de ese 'Yo' Real, el Atman, que los sabios postulan? Y, la pregunta cumbre, ¿cómo se relaciona ese centro de mi ser con la vasta realidad del universo?
Les dejo con esta pregunta resonando en su interior: si por un momento dejaran de identificarse con su nombre, su historia y su cuerpo... ¿qué nos queda?


 
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nos interesa su opinión: