viernes, 19 de noviembre de 2021

SEGUIR APRENDIENDO: Prof: Ana Menghini (18-11-21)

 VIDA Y OBRA DE SWAMI VIVEKANANDA

29 - A los pies del Maestro



Fue Sri Ramakrishna quien reeducó a Narendranath en lo esencial del hinduismo. Él fue la encarnación de la fe hindú. Las creencias que Narendra había aprendido en el regazo de su madre habían sido destrozadas por una educación universitaria, pero el joven ahora llegó a saber que el hinduismo no consiste en dogmas o credos; es una experiencia interior, profunda e inclusiva, que respeta todas las creencias, todos los pensamientos, todos los esfuerzos y todas las realizaciones. La unidad en la diversidad es su ideal.

Narendra aprendió además que la religión es una visión que, al final, trasciende todas las barreras de casta y raza y rompe las limitaciones de tiempo y espacio. Aprendió del Maestro que el Dios personal y la adoración a través de símbolos conducen en última instancia al devoto a la realización de la unidad completa con la Deidad. El Maestro le enseñó la divinidad del alma, la no dualidad de la Deidad, la unidad de la existencia y la armonía de las religiones. Le mostró a Naren con su propio ejemplo cómo un hombre en esta misma vida podía alcanzar la perfección, y el discípulo descubrió que el Maestro había realizado la misma conciencia de Dios siguiendo las diversas disciplinas del hinduismo, el cristianismo y el islam.

Un día, el Maestro, en un estado de ánimo extasiado, dijo a los devotos: 

Hay muchas opiniones y muchas formas. Las he visto todas y ya no me gustan. Los devotos de diferentes religiones se pelean entre ellos. Déjame decirte algo. Ustedes son mi propia gente. No hay extraños alrededor. Veo claramente que Dios es el todo y yo soy parte de Él. Él es el Señor y yo soy Su siervo. Y a veces pienso que Él es yo y yo soy Él. 

Narendra consideraba a Sri Ramakrishna como la encarnación del espíritu de la religión y no se molestó en saber si era o no una Encarnación de Dios. Se mostró reacio a colocar al Maestro en cualquier molde teológico. A Naren le bastaba con poder ver a través de la perspectiva de las experiencias espirituales de Ramakrishna todos los aspectos de la Deidad.



¿Cómo impresionó Narendra a los otros devotos del Maestro, especialmente a los jóvenes? Él era su ídolo. Estaban asombrados por su intelecto y fascinados por su personalidad. En apariencia, era un joven dinámico, rebosante de vigor y vitalidad, con un cuerpo físico ligeramente por encima de la estatura media y algo más grueso en los hombros. Era elegante sin ser femenino. Tenía una mandíbula fuerte, lo que sugiere su firme voluntad y determinación fija. El pecho era expansivo y la amplitud de la cabeza hacia la frente significaba un alto poder mental y desarrollo. Pero lo más notable de él eran sus ojos, que Sri Ramakrishna comparó con pétalos de loto. Eran prominentes, pero no sobresalientes, y parte del tiempo su mirada estaba retraída, sugiriendo el hábito de la meditación profunda; su color variaba según la sensación del momento. A veces eran luminosos en profundidad, y otras veces brillaban de alegría. Dotado de la gracia nativa de un animal, era libre en sus movimientos. A veces caminaba con paso lento y otras con rapidez, siempre una parte de su mente absorta en pensamientos profundos. Y era un placer escuchar su voz resonante, ya sea en la conversación o en la música. Pero cuando Naren hablaba en serio, su rostro a menudo asustaba a sus amigos. En una acalorada discusión, sus ojos brillaban. Si se sumergía en sus propios pensamientos, creaba un aire tan distante que nadie se atrevía a acercarse a él. Sujeto a diversos estados de ánimo, a veces mostraba una impaciencia absoluta con su entorno y, a veces, una ternura que derretía el corazón de todos. Su sonrisa era brillante y contagiosa. Para algunos era un soñador feliz, para otros vivía en un mundo real rico en amor y belleza, pero para todos parecía infaliblemente un vástago de un hogar aristocrático.

¿Y cómo consideraba el Maestro a su amado discípulo? Para citar sus propias palabras: 

Narendra pertenece a un plano muy elevado: el reino del Absoluto. Tiene una naturaleza varonil. Muchos devotos vienen aquí, pero no hay nadie como él. De vez en cuando hago un balance de los devotos. Encuentro que algunos son como lotos con diez pétalos, algunos como lotos con cien pétalos. Pero entre los lotos, Narendra tiene mil pétalos. Otros devotos pueden ser como vasijas o cántaros; pero Narendra es un enorme barril de agua. Otros pueden ser como estanques o tanques; pero Narendra es un enorme embalse como el Haldarpukur. Entre los peces, Narendra es una enorme carpa de ojos rojos; otros son como pececillos. Narendra es un "receptáculo muy grande", que puede contener muchas cosas. Es como un bambú con un gran espacio hueco en su interior. Narendra no está bajo el control de nada. No está bajo el control del apego o los placeres de los sentidos. Es como una paloma macho. Si sostienes un pichón por el pico, se separará de ti; pero el palomo se queda quieto. Siento una gran fuerza cuando Narendra está conmigo en una reunión.

 

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