lunes, 18 de mayo de 2020

REFLEXIONES ESPIRITUALES: Lic. Artur Flier: EL MEJOR ANTIVIRAL




EL MEJOR ANTIVIRAL

Algunos estudiosos plantean que podríamos estar en presencia de una sexta extinción en nuestro planeta. Tal afirmación no debería atemorizarnos puesto que
tampoco podemos anticipar lo que sucederá en el próximo minuto de nuestras propias vidas y sin embargo continuamos con nuestras rutinas.
No obstante, me parece interesante considerar que podrían ser ciertas aquellas afirmaciones con el sólo propósito de vivir más intensamente nuestro presente. De hecho, la cuarentena nos brinda una oportunidad única para dejar de actuar como hamsters en la rueda del sistema y poder colocarnos en el lugar de testigos de
nuestras propias vidas cotidianas para recuperar el sentido de las mismas conservando lo valioso así como descartando aquello superfluo que nos resta tiempo y energía, es decir, vida.
Quienes creemos que la presente existencia es un paso más en el ciclo de vidas y muertes, tal supuesto no nos libera de responsabilidades sino por lo contrario nos
conmina a intensificar el trabajo espiritual para honrar aquello por lo que fuimos creados.
De hecho, más allá de la hipótesis de extinción de la raza humana, es claro que a nivel individual todo avenir resulta incierto y que antes que buscar puertos
seguros debemos aprender a navegar nuestras vidas sin surfear las olas sino antes bien sumergiéndonos cada vez más profundo. Ello no creo que nos lleve al ahogo
sino antes bien a la transformación. Por qué navegar en la incertidumbre? Porque de hecho, los sucesos más importantes de nuestras vidas no dependen de nuestra
voluntad. Por otra parte, actuemos con sentido común más allá de toda creencia científica o religiosa. Esta cuarentena nos ofrece una excelente oportunidad de dar unos pasitos en nuestro desarrollo interior. Ya sabemos que las categorías “bueno-malo” son relativas ya que dependen no sólo del objeto en cuestión sino también de
tiempo, lugar y cultura en que se expresen. Según hemos leído de S. Vivekananda, la categoría que realmente cuenta es la mayor o menor manifestación de nuestra
divinidad interior.
En conclusión: ya sea por dejar un legado sutil, en el plano espiritual a este planeta como agradecimiento a toda la maravillosa naturaleza recibida y como disculpas
ante tanta agresión; ya sea por sentido común, no dejemos pasar esta oportunidad de ser mejores personas focalizando nuestro tiempo en la autobservación y
prácticas recibidas.
Considero que el mejor antiviral para nuestra protección espiritual como para el cuidado del planeta es ponernos en acción no como eslabones de un sistema
productivo sino como verdaderos seres humanos
ARTURO FLIER

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nos interesa su opinión: