domingo, 20 de enero de 2019

Artículo: Dra. Ana Nieva: EL DESARROLLO ESPIRITUAL Y EL AUTOCONTROL



EL DESARROLLO ESPIRITUAL Y EL AUTOCONTROL
SWAMI ABHEDANANDA
Swami dueño de profunda erudición, expresa, sin embargo, con sublime sencillez de la práctica vedántica al exponer. Nos exhorta a cultivar pureza de pensamiento y espíritu de caridad para lograr el autodominio, condición previa para la etapa de concentración y meditación, tras la cual el buscador sincero logra conciencia divina.
Hay un aspecto de la religión esencial y otra no esencial. Lo que no quiere decir necesaria para algunos momentos de la vida.
La no esencial es la de los dogmas, ritos, mitología de los diferentes credos
LA ESENCIAL se refiere al AUTOCONTROL DE SI MISMO, (significa conocimiento del ser superior por conocimiento de la naturaleza divina), refrenar al yo inferior o sea nuestra naturaleza inferior. Y al CONOCIMIENTO DE SI MISMO.
Los que entienden lo esencial lo llevan a la practica diaria
El conócete a ti mismo de los griegos, Heráclito filosofo de la antigua Grecia dijo: Incumbe a todo hombre conocerse a si mismo y ejercer autocontrol.
El verdadero control se logra cuando se ha sujetado al yo inferior, mediante el desarrollo de los poderes superiores que están latentes en el alma individual.
El yo inferior que sigue ciegamente a sus amos los sentidos internos: LA CONCUSPICENCIA, LA IRA, LA CODICIA, EL AUTOENGAÑO, EL ORGULLO, EL EGOTISMO. Todas estas características dan “MENTES AGITADAS” y por lo tanto no disfrutan de felicidad, ni calma, ¿COMO PUEDEN TENER FELICIDAD LAS PERSONAS ESCLAVAS DE LOS SENTIDOS?
Vamos a introducir un texto de Neurociencias entre comillas para ir a un texto actual y darnos cuenta como lo que Swami Abhedanada hace más de 100 años explica procesos de la mente sin obviamente estas mediciones “Dr. MANES Y NEROCIENCIAS: Errar es humano perdonar es muy sano. EN UNA INVESTIGACION realizada por la Dra Charlote Van Oyen Witvliet , se les pedía a los participantes que recordaran una persona que se había comportado mal con ellos en el pasado. Y se les hacían tres preguntas 1) ¿Se les preguntaban que tan grave había sido la ofensa, 2) si habían recibido disculpas y3) si se había mantenido la relación luego de eso? A los participantes se le aplicaban dispositivos (, positivos que permitan registrar el stress (tensión facial, TA, FC, sudoración.) se hacían mediciones Y luego se les leía un texto que podía hacerlos pensar en generar empatía y perdón o para propiciar el evento o enojo. Se encontró que las mediciones de estrés seguían aumentando cuando predominaba el enojo. En otra investigación usando neuroimágenes se observó que el hecho de contemplar si una determinada acción merece perdón activaba varias regiones del lóbulo prefrontal y el cingulado posterior, que se ASOCIAN AL RAZONAMIENTO, LA RESOLUCION DE PROBLEMAS, LA COMPRENSION DEL ESTADO MENTAL DE OTROS Y EL CONTROL COGNITIVO. EN CAMBIO, EL ENOJO, EL RENCOR, EL DESEO DE VENGANZA OBSTACULIZAN EL PENSAMIENTO RACIONAL, AL COINCIDIR CON UNA MAYOR ACTIVIDAD DE LA AMIGDALA CEREBRAL, (pequeña región ubicada en la parte media del lóbulo temporal). CONCLUSION: EL AUTOCONTROL CONSISTE EN INHIBIR LAS REACCCIONES IMPULSIVAS CAUSADAS POR EL RENCOR”
Martin Luther King en sus discursos decía muchas veces” Hay algo bueno hasta en el peor de
Nosotros y algo malo en el mejor de nosotros””

Ahora continuamos con el texto de Swami que dice: La tendencia natural de los seres humanos, lo mismo que los animales son “BUSCAR PLACER Y EVITAR DOLOR”.
Pero la felicidad solo es `posible en el estadio de perfecta libertad y no de esclavitud y la libertad solo puede lograrse por el autocontrol por lo tanto aquellos que quieran lograr paz mental e ilimitada felicidad en esta tierra deberían luchar para alcanzar la libertad aprendiendo autocontrol.
Lo primero para el logro del autocontrol es “ESTUDIAR SU PROPIA MENTE” descubrir sus debilidades, tratar de reformar el carácter. Mientras viva en la oscuridad de la ignorancia y no pueda encontrar la causa de su felicidad o desdicha mientras no sepa si la felicidad y el placer vienen de los objetos externos o vienen de adentro, el hombre no puede llegar a ser dueño de si mismo. El recto discernimiento de las condiciones que hacen a un hombre feliz o infeliz es la guía mas segura en el sendero que conduce al logra del autocontrol.
Examinemos ahora la presente condición de nuestras mentes. Ellas son naturalmente atraídas por los objetos agradables a los sentidos, o aquellos que ayudan a cumplir nuestros mas fuertes propósitos y deseos. Nunca se apegan a ninguna cosa o persona que no hallen placer. Del mismo modo puede demostrarse que la tendencia natural de la mente es alejarse de todo lo penoso. Los ojos gustan mirar atrayentes y lindos colores; los oídos escuchar dulces palabras, notas melodiosas y buena música. Sentimos deleite en oler suaves perfumes y comer todo lo que agrada al paladar. Sin embargo, lo que causa placer a una persona puede disgustar a otra, a muchos les gusta la comida condimentada y picante y a otros les disgusta. El mismo color, sonido o sabor que agrada a uno es de gran molestia para otro. Esto demuestra que el placer y el dolor no son propiedades inherentes a los objetos de los sentidos si no que dependen de las condiciones de la MENTE y el cuerpo que tienen contacto directo con dichos objetos.
La MENTE tiene un tremendo poder sobre el cuerpo; si una idea se apodera de la mente, ella afecta al cuerpo y produce los correspondientes cambios en todo el sistema. La misma mente, llega a detestarlas con solo verlas, si nuestras ideas penetran en ellas. Por ejemplo, la carne es muy agradable para algunos y piensan que es el alimento apropiado para ellos; pero si descubren los nobles principios de la dieta vegetariana y la adoptan, no podrían soportar ni el olor de la carne.
Por lo tanto, podemos decir que no existe nada en el universo que sea fuente de absoluto placer o dolor para todos los individuos, o que si quiera pueda agradar siempre a la misma persona. Los que buscan placer en los objetos sensorios no pueden gozar una misma cosa todo el tiempo. Si tratan de hacerlo se hastiarán, la saciedad será el resultado inevitable y con la saciedad el interés.
¡¡Imaginemos escuchar día y noche opera!!seguramente en pocos días se hastiará.
El constante cambio de los objetos de goce es absolutamente necesario para aquellos que buscan el placer en el mundo exterior. Es por eso los pobres que no pueden procurarse una gran variedad de placeres, se engañan pensando que la riqueza podría traerles todo eso y envidian a los que poseen grandes fortunas, creyendo insensatamente que los ricos deben ser siempre felices y así no pueden disfrutar de placeres que tienen a su alcance. La verdad es que la felicidad autentica solo pertenece a quien puede “CONTROLAR SU PROPIA MENTE”.
La práctica d autodominio sería una gran bendición para todas las personas que se sienten desdichadas; haría su vida más feliz y digna de ser vivida.
Antes de que podamos refrenar la natural tendencia de la mente a salir a buscar placeres en el mundo externo, debemos saber que las sensaciones placenteras dependen de las penosas. Si nunca experimentamos nada doloroso, no podríamos disfrutar de ninguna sensación agradable.
Nuestras mentes buscan constantemente nuevos objetos de placer a través de la puerta de los sentidos y se apegan a cada cosa nueva que promete darnos una sensación agradable. Mientras dure el apego, la mente se convierte en esclava. SI el deseo es muy intenso y no lo logramos por medios ordinarios, nos encolerizamos y adoptamos métodos mas violentos, perdiendo así toda posibilidad de paz mental.
Todo empieza como impresión latente de la mente, luego se transformará en simple DESEO, y luego toma la forma avasalladora de PASION, agita la mente a fondo y se manifiesta como IRA, E INQUIETUD. En ese agitado estado de animo perdemos el sentido de lo bueno y lo malo, la memoria se ofusca, el entendimiento se confunde, no podemos prever las consecuencias de nuestros actos y obramos como brutos.
La pasión y la ira conducen al odio, a los celos y otros malos sentimientos, los que se manifiestan exteriormente como actos viciosos. El que puede impedir que su mente sea perturbada por la pasión y la ira ya ha logrado el dominio de sí mismo.
Hemos visto que la pasión y a ira son la segunda y tercera etapa del deseo. Los deseos según los yoguis permanecen en el plano subconsciente de nuestra mente aquí surge la pregunta: ¿Cuál es la causa de esos deseos? El yogui tratando de encontrar el origen de los deseos, dice que ellos son las expresiones latentes en nuestras mentes; cuando las impresione se despiertan se llaman DESEO. Dice también que cuando gozamos de cualquier objeto externo por medio de los sentidos, nuestra mente recibe la impresión de ciertos cambios que se producen mientras estamos en contacto directo con el objeto (cuando como una manzana la impresión queda en mi mente, cuando oímos una nota musical agradable o desagradable persiste en la mente.
De modo similar la impresión de todos los objetos externos quedase allá en forma de semillas o impresiones latentes. Esas impresiones latentes son las causas de nuestros deseos.
Supongamos que la sustancia mental es como un mar; que la superficie es el plano consciente
Y las impresiones latentes están por debajo de la superficie. Aquí debemos recordar que todo lo latente tiende a manifestarse en cuanto las condiciones se tornan favorables. Cuando las impresiones forzadas por su naturaleza intrínseca comienzan a manifestarse, suben lentamente, desde el fondo del mar mental en forma de diminutas burbujas. A cada una de estas burbujas las podemos llamar deseo en estado sutil. A medida que la burbuja llega a la superficie se hace cada vez más grande, hasta que la podamos llamar deseo, estas burbujas tan grandes luego de jugar en la superficie por cierto tiempo estalla, toma la forma de ola y agita todo el mar de la mente transformándolo en una masa de impulso. La mente pierde la calma, la paz queda perturbada, el poder de discernimiento se ofusca, no sabemos si cediendo al impulso los resultados serán buenos o malos; a borbollones somos arrastrados por la fuerza hacia el objeto de deseo, (ya sea mental orgullo, ambición) o meramente sensorio. De hecho, al subyugar a nuestro poder de control, esa ola ya no puede llamarse deseo, debe llamarse PASION dominante. Entonces luchamos para satisfacer nuestro anhelo, pero una vez conseguido el objeto y saciado el deseo, descubrimos que la satisfacción dura poco.
La tempestad que hizo naufragar nuestro dominio propi gradualmente amaina y el deseo que la provocó vuelve al estado latente; recobramos transitoriamente una situación de calma mental y quedamos felices por ciertos tiempos.
¡Entretanto otra impresión latente se despierta y aparece otra burbuja! Esta ininterrumpida serie de deseos y su temporaria satisfacción forma la vida diaria de todas las personas que no han aprendido a controlar sus mentes. Una vez lograda esa precaria paz que llamamos felicidad, vuelve a su estado latente por un periodo mas o menos largo, Este proceso es continuo en cualquier mente y en todo momento. (ejemplo pruebo algo exquisito, esto dejara una impresión latente).
Cada vez que cede a un deseo, la vieja impresión se profundiza, hasta que las impresiones acumuladas son tantas que se convierten en habito y forman parte de la naturaleza del hombre.
Las impresiones acumuladas en una vida no se pierden con la muerte del cuerpo, si no que quedan latentes cierto tiempo y se convierten en causa de deseos en la vida futura.
No hay esperanza de satisfacer los deseos de goce consiguiendo los objetos de placer. Las personas insensatas que nunca analizan sus mentes dan satisfacción a sus deseos y buscan placer en los objetos externos.
Nadie a logrado el autodominio sometiéndose como un esclavo a sus deseos; como dicen los yoguis “Como el fuego no se apaga con manteca así el ardor del deseo no se apaga con los objetos de placer.
La sed de placer es nuestra verdadera enfermedad, sus síntomas la lujuria, la ambición, el orgullo, el odio, los celos, la ira, etc.
CONQUISTAR LA MENTE es más difícil que conquistar el mundo entero. Por tanto, debemos:
  1. Prestar especial atención al estudio de la mente
  2. Debemos aprender a analizar su naturaleza
  3. Vigilar constantemente sus varias modificaciones, tratando de desarrollar y robustecer el poder de la voluntad
  4. Aplicar el discernimiento
  5. Reformar el carácter.
El yogui desarrolla el poder de la voluntad con su práctica diaria.
El perfecto autocontrol del yogui es aquel estado mental en que no hay ninguna clase de deseos y pasiones que puedan perturbar la paz y tranquilidad del alma. Ese estado puede ser alcanzado más fácilmente si eliminamos las burbujas de los deseos cuando aun no se han transformado en olas de pasiones, o sea atacándolas mientras sean débiles.
Esto puede hacerse, analizando la naturaleza de los deseos, o bien comparando el placer transitorio que nos proporcionan los objetos sensorios con el estado pacifico y sereno de la mente que no es perturbada por deseos y pasiones. También debemos recordar que el mas elevado ideal de nuestra vida no es disfrutar el placer de los sentidos y ser esclavos de las pasiones, sino obtener el dominio sobre el yo inferior y realizar el ser divino.

Otro modo de lograr el dominio de si mismo es mediante CONCENTRACION Y MEDITACION

Concentrad vuestra mente en el SER SUPREMO y no permitáis que ninguna otra idea o deseo la estorbe en ese tiempo. Los que han leído Luz de Asia recordaran que cuando Buddha se sentó a meditar bajo el árbol de bo, todas las impresiones latentes comenzaron a surgir en su mente. Se las describe como acompañantes de Mara, la personificación de los malos pensamientos. Pero Buddha dijo: “Es mejor morir en el campo de batalla luchando contra el enemigo que ser vencido y forzado a vivir como un esclavo en busca de pequeños goces y placeres de los sentidos”. Con tan poderosa determinación Buddha se convirtió en amo de sí mismo. Quienquiera tenga una similar de propósito y fuerza de carácter lograra, con certeza, el perfecto autodominio. Solo aquellos que han adquirido el control de si mismos gozan de perpetua paz y felicidad en esta vida y alcanzan la meta de todas las religiones: EL CONOCIMIENTO DEL SER DIVINO.

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