En una oscura noche pasaba un derviche junto a un pozo seco, cuando oyó un grito de auxilio desde el interior de éste. "¿Que sucede?", preguntó, mirando hacia el interior del pozo.
" Soy un gramático y desgraciadamente, debido a que ignoro el camino, caí en este profundo pozo, en el que ahora estoy casi inmovilizado", respondió el otro.
"Agarrate, amigo, que voy a buscar una escalera y soga", dijo el derviche.
" ¡Un momento, por favor ", dijo el gramático. " Tu gramática y pronunciación son defectuosas, ten bien corregirlas."
"Si eso es mucho más importante que lo esencial", gritó el derviche," será mejor que tú permanezcas donde estás, hasta que yo haya aprendido a hablar correctamente. "
Y siguió su camino.
Este cuento fue relatado por Rumi; algunos cuentos sufies son de maravillas, otros históricos y otros son del extraño género de "historias ilustrativas", es decir, una serie de hechos entretejidos para ilustrar procesos psicológicos.
Por esa razón tales cuentos han sido llamados " El Arte de los científicos derviches".
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