Amor divino y desarrollo espiritual
Conferencia de Swami Pareshananda
en Programas de la Fraternidad RA-SA-VI; Grupo Sri Ramakrishna (Mar del Plata): Zoom 2.2.23 (transcripción y edición: Leonor Bakún)
Nárada destaca de distintas maneras el significado de renunciación. Ahora en el aforismo 11 dice algo muy importante, muy simple y a la vez muy difícil: utiliza la palabra indiferencia. Para desarrollar el verdadero estado de renunciación uno necesita ser conscientemente indiferente. Indiferencia significa ‘encima de todos’, ‘estar arriba’. Así, el mundo cotidiano del devoto continúa, pero su estado de conciencia, su amor por la divinidad, por Dios, está por arriba de esto: “Indiferencia a todo lo contrario a Aquello” (Aquello es Dios o devoción). Es la realización de actividades seculares y sagradas que sean favorables a Aquello. No cambia de lugar, todo continúa, pero su ser interior está tan atraído hacia la divinidad que su conciencia permanece arriba de todo eso. El ser interior del devoto ha de dirigirse a Dios de todas las maneras posibles. Este concepto lo encontramos en el Bhagavad Gita, también en el Srimad Bhagavatam y en otros textos. Aquí Nárada elabora el modo en que un devoto está atraído a Dios y es indiferente a lo demás, nos dice: “Con los ojos ve la forma del Señor, con los oídos escucha la gloria de Dios, con la lengua canta la gloria de Dios, degusta la comida ofrecida al Señor, con la piel siente la toda abarcante presencia del Señor, con las manos sirve al Señor” y así sucesivamente. Rabindranath Tagore en un poema muy devocional dice: “El viento está llegando, el viento está soplando, Señor, con tu aroma, tu perfume”.
Todo el esfuerzo de la vida de un devoto está orientado favorablemente para amar a Dios. Uno puede amar, por ejemplo, un nieto y eso está bien, porque está sintiendo la presencia de Dios en él. El punto es divinizar. Haga lo que uno haga, debe tratar de sentir en eso que hace, el lado divino. El mundo fenoménico sigue con su contradictorio panorama, más el devoto está enteramente dedicado a la divinidad. De ese modo, aun cuando puede llegar a estar siempre activo, se coloca por encima de todas las dualidades y permanece imperturbable. Nárada usó la palabra udasinata (indiferencia). Estar por encima de todas las dualidades. Tan fácil y al mismo tiempo tan difícil porque normalmente nosotros, los seres humanos, estamos indebidamente apegados, apegados con cualquier cosa, sabemos que eso no sirve pero igualmente lo estamos y así continúa el panorama de dualidades.
- Profesora Leonor Bakún
maravilloso!!
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