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La Santa Madre Sarada Devi

Vivencias de La Santa Madre por Swami Sarvapriyananda

Si pensamos en la vida de la Santa Madre vemos lo común qué fue así, tal como nuestras vidas. 

Que habría hecho Ramakrishna si Le hubieran pedido que hiciera lo que la Santa Madre hizo? Alimentar a las mujeres en la casa, a los devotos que concurrían, cuidar a los monjes, los asuntos de Su propia familia y los de la creciente Orden Ramakrishna, entre tantas otras tareas. Seguramente Él hubiera entrado en samadhi inmediatamente. No hubiera hecho nada de esto.

O sí a Swami Vivekananda le hubieran pedido hacer todas esas cosas en lugar de ir alrededor del mundo predicando el Vedanta, que se quedara en un pueblito remoto de Bengala cuidando de un puñado de personas muchas de ellas incluso molestas, que cortara vegetales, cuidara las vacas en el establo y todo eso, imaginen lo que diría: “me voy a meditar a las cuevas de los Himalayas”. Sin embargo es la Santa Madre quien hizo todo esto.

Ella jugaba el rol de persona simple así como somos nosotros en nuestra vida. Ramakrishna estaba en éxtasis frecuentemente, vivía en constante comunión con Dios, predicando acerca de Dios a través de Su ejemplo y dando Sus propias enseñanzas. Cuåntas personas conocemos como Vivekananda y cuåntas podemos ser como él? Estos seres con estas características no han podido ser replicados. Lo que puede ser replicada es nuestra propia vida común y ésto es lo que La Santa Madre hizo.

Ella demostró como podemos aplicar todas las grandes enseñanzas a nuestra propia vida cotidiana. Cómo podemos volver nuestra vida bendita.

Justamente por ser tan simple es tan difícil comprenderLa.

En la vida espiritual, tanto los devotos como los monjes son atraídos primeramente por Swami Vivekananda, luego de un tiempo comienzan a entender a Sri Ramakrishna y solamente luego de mucha madurez en la vida espiritual se puede pasar de Ramakrishna a la Santa Madre. En la etapa final de la vida espiritual es que se toma refugio en La Santa Madre. 

Swami Turiyananda en sus últimos años de vida, decía: “Madre, Madre, Madre” todo el tiempo. Otro gran Swami un Brahma Gnani decía siempre “Hari Om” y ya en sus últimos días repetía “Ma, Ma, Ma”. Sería esperable que cuanto más maduros seamos en nuestra vida espiritual pasemos de Swamiji a Sri Ramakrishna y finalmente a la Santa Madre.

En Belur Math el templo de Sri Ramakrishna es inmenso. El de la Santa Madre es pequeño, sin embargo es muy popular. Si bien es pequeño el templito siempre se encuentra gente allí rezando, meditando, llorando o tan sólo sentados allí. 

Cuenta el Swami Sarvapriyananda: ”Un día mientras estaba caminando por Belur Math me pregunté cómo desde el punto de vista de Dios, Él nos vería a nosotros y justamente apareció ante mí el templo de la Madre y vino inmediatamente la respuesta. Por supuesto, Dios nos vería como Sus hijos, somos los hijos de Dios.

En todas las religiones Dios es definido como el creador del universo, Aquél del cual el universo nació y por el que el universo existe y al que el universo finalmente retorna, entonces Dios es la Madre.

La Santa Madre fue primero y principalmente una madre.

Swami Arupananda quien fue por largo tiempo Su asistente y a la vez su discípulo contó una muy bella reminiscencia: “cuando fui por primera vez a recibir iniciación de la Santa Madre, Ella estaba parada en Su casa de Jayrambati y me miró con esa tierna mirada que Ella tenía en Su rostro. Este Swami había perdido a su madre siendo un niño así que cuando vio a la Madre, algo en él sintió que Ella era realmente su madre, eso quedó con él toda su vida. Tuvo una conversación interesante con Ella, Le preguntó: “eres Tu verdaderamente La Madre de todos?”. Ella dijo: “sí”.” Realmente eres la madre de todos?” Ella volvió a decir que sí. “Incluso de los pájaros, de las bestias y los insectos?” Ella dijo:” sí, aun de todos”. Entonces el dijo: “si son Tus hijos por qué sufren tanto?” Ella dijo: “este nacimiento animal es así, tienen que ir a través de estas experiencias . Pero todos son mis hijos”.

Las vacas que estaban en sus establos, los gatos, los loros, todos sentían que la Santa Madre los amaba, ellos respondían a Ella de una manera especial. 

Había un gato muy travieso que robaba comida de todos lados, haciendo travesuras en la casa. Sin embargo, encontraba protección a los pies de la Santa Madre y cuando alguien se enojaba con él o quería pegarle, Ella protegiéndolo decía: “es la naturaleza del gato, dónde va a conseguir comida? Por eso es que la roba. Podrían alimentar al gato así no necesitaría robar comida”. Una vez un monje ya cansado de ese gato le pegó y la Santa Madre quedó muy herida, Le dijo: “no le pegues, aliméntalo” y para estar segura que el monje no le pegaría en Su ausencia Ella dijo: “yo vivo en ese gato, yo estoy allí”. 

De ese modo se aseguró por siempre que nadie lo tocaría nuevamente. Cuando el gato estaba particularmente travieso, Ella amenazaba con pegarle y le advertía que no hiciera eso. Miren que interesante la reacción la del gato. Luego de esa advertencia, el animal se sentaba a Sus pies, La miraba y cuando lo amenazaba con ojos hasta curiosos se tiraba a Sus pies. Creo que el gato nos representa a todos nosotros.

Ella fue la Madre para todos, nunca rechazaba a nadie y a todos protegía. En Belur Math una vez sucedió que estando allí Swami Vivekananda, se encontraban unos trabajadores. Uno de ellos fue atrapado robando algo del Monasterio y Swamiji lo echó. Era un hombre muy pobre. El trabajador fue directo a la casa de la Madre, contó lo sucedido y Ella le dijo a Swami Premananda quien justamente La visitaba, lo siguiente: “este hombre es muy pobre, que va a hacer? Naren lo echó de su trabajo, dile que lo tomen nuevamente, dile que yo lo digo”. Swami Premananda dijo: “Naren estará furioso si vuelvo con esta persona que fue expulsada por ®él”, la Santa Madre replicó: “dile que yo dije eso, eso es todo”. Swami Premananda estaba nervioso y regresó a Belur Math con el trabajador. Cuando estaba llegando Swami Vivekananda lo miró a lo lejos y dijo: “miren lo que Baburam hizo, trajo a este compañero de vuelta”. Baburam le dijo: “él fue a lo de la Santa Madre y Ella pidió que lo trajera nuevamente”. 

El trabajador estaba asustado por Swami Vivekananda pero éste comenzó a reír y dijo: “ah ,fuiste directamente a la Corte Suprema, ahora yo no puedo hacer nada” así es que fue tomado nuevamente. 

Ella nunca rechazaba a nadie. Una vez uno de Sus devotos cercanos Le dijo “nosotros hemos visto a Sri Ramakrishna y ahora la vemos a Usted. Sri Ramakrishna sin dudas nos quería más que Usted”. La Santa Madre dijo: “que es eso sobre lo que ustedes se preguntan? Sri Ramakrishna elegía a Sus discípulos muy atentamente, Él aceptaba solo a unos pocos y luego de muchos tests. En tanto a mí me mandó una fila de hormigas. A todos los gigantes Él los agarró y para mí dejó estas hormigas”.

La forma principal de mostrar Su Gracia fue iniciando, dando Mantra Diksha, transmitiendo poder espiritual. Ella era la dadora del conocimiento espiritual y de la liberación. 

Otra anécdota: había tres devotos que Swami Brahmananda en Belur Math rechazó darles iniciación. Como insistían les dijo: "pueden ir con La Santa Madre a Jayrambati. Si Ella quiere puede iniciarlos, pero yo no puedo hacerlo”. Probablemente su karma fuera muy malo.

Los maestros iluminados toman para sí el karma de los devotos. Contraen así varios tipos de enfermedades. La Santa Madre decía que Sri Ramakrishna nunca cometió un pecado en Su vida y sin embargo sufrió un cáncer padeciendo un terrible dolor. Él tomó para Sí mismo los pecados de Sus devotos y los liberó del sufrimiento que seguramente tendrían que atravesar, acrecentando de ese modo la vida espiritual de ellos. No fue esto para economizarles sufrimientos sino para liberarlos en su vida interior. 

Asi es como Swami Brahmananda rehusó darles iniciación a estos tres individuos. 

Él podía ver lo que había para ellos debido a su karma. Cuando fueron a Jayrambati alguien le dijo a la Santa Madre: “Tres personas llegaron enviados por Swami Brahmananda para recibir iniciación” la Santa Madre los miró y los rechazó. 

Ellos recibieron un shock con esto, La Madre les dijo a otros devotos que estaban presentes: “uno de los chicos me trajo buenos presentes luego de su viaje y miren lo que me ha enviado Rakhal. Esto es lo que me envió” Los hombres escucharon ya que estaban sentados afuera y comenzaron a llorar. Nuevamente le pidieron a la Madre y a  la tercera vez Ella aceptó y los inicio. Cuando volvieron a Calcuta fueron a Belur Math y contaron esto. Dieron el reporte a Swami Brahmananda quien estaba con Swami Saradananda, Swami Premananda, Swami Turiyananda y probablemente Swami Shivananda. Sentados en un banco frente al Ganges. Cuando escucharon que los tres hombres fueron iniciados, todos quedaron muy serios. Swami Premananda dijo:”Gracia, Gracia. Que veneno es este que nos habría reducido a cenizas a nosotros y la Santa Madre lo asimiló sin siquiera un murmullo”. Estos seres tenían la capacidad de ver el pasado. Que habría en estos tres hombres en su pasado? 

Ella iniciaba en cualquier lado: en el templo, en un cuarto, en la calle, aun en el andén de un ferrocarril. Una vez un changarín La vio parada, él no La conocía así como Ella a él tampoco. El hombre estalló en llanto al verLa, corrió a Sus pies y dijo:”Oh Madre Janaki” (Madre Sita), “cuánto tiempo esperé por Ti! Dónde has estado todos estos años?” Ella imperturbable allí mismo en el andén lo inició. Recordemos que esto es muy evocador para la mentalidad hindú. 

Sita y Rama. Rama es una Encarnación, Sita su Shakti. Está la Encarnación de Rama, por otro lado la de Krishna y la Encarnación de Ramakrishna. Dios y la Santa Madre que es la Encarnación de la Divina Madre, la Shakti de Dios.

Cuando este pobre, no educado, probablemente iletrado changarín sin conocerLa solo La miró y Le dijo: “Tú eres mi Madre Sita, mi Madre Janaki” Pueden ver que tipo de resonancia se estableció.

Ella iniciaba en cualquier lado y nunca dejaría a nadie de lado. 

Hay una diferencia entre Ella y la madre humana. La Santa Madre podía asumir Su naturaleza Divina lo que Le permitía brillar con efulgencia. Esto era increíble y a la vez atemorizante.

Swami Arupananda, el asistente de La Madre un dia estaba ayudando a construir una nueva cabaña en Jayrambati. Entre los hermanos y parientes de la Santa Madre había algunos de ellos pobres y codiciosos. Sabían que gente rica de Calcuta daba dinero a la Madre y seguramente ellos pretendían pedirle ese dinero. 

Esto molestaba mucho a Swami Arupananda. Estos familiares incluso le decían:”usted está haciendo todas estas mejoras en la casa, por que no hace algo por nosotros o nos da un poco de dinero?”. Finalmente el Swami se disgustó y pensó: “Yo me hice monje para aguantar esto?”.

Fue a ver a la Santa Madre y Le dijo: “ Sus hermanos son muy codiciosos y me molestan. No es para esto que yo me hice monje. Ya lo decidí. No voy a hacer más este trabajo. No quiero más este tipo de trabajo”. Él pensó que tal vez la Santa Madre lo alentaría a continuar, sin embargo Ella estaba parada en una pequeña plataforma elevada de la cabaña con su mano en el poste de bambú. Tenía una extraña y lejana expresión en Su rostro y de repente dijo: “no querés hacer mi trabajo? No lo hagas”. En ese momento el Swami Arupananda La miró y según relata el Swami Chetanananda, al mirarla vio un halo divino alrededor de Ella. Ya no parecía una simple mujer de pueblo, sino una Diosa. Una luz impresionante surgía de Ella, una mirada lejana en sus ojos, inmediatamente el Swami Arupananda se tiró a Sus pies y Le dijo:”no, no, haré este trabajo, haré lo que Usted me diga”.