Antiquísimas escrituras sobre el
poder del canto dicen:
El canto es una práctica importante y misteriosa.
No es solo una práctica, el canto es el néctar supremo,
un tónico que alimenta completamente a nuestro ser interior.
Si queremos experimentar el amor, el mejor medio es cantar
los Nombres de Dios. El canto abre el corazón y hace que el
amor fluya en nuestro interior, libera una dicha interior tan
embriagante que solo por el néctar que genera, podemos
entrar en la morada del ser.
Grandes, grandes santos, alcanzaron la perfección cantando
los mantras.
Oh mente mía, canta el nombre, cántalo de día y de noche,
y solo entonces encontrarás el verdadero reposo.
Cantando el Nombre, líbrate de deseos y deléitate en el ser
interior. El camino es sencillo pero trae la dicha mas elevada.
Un gran Maestro del Nombre escribió:
No sólo el corazón sino todo el cuerpo se rejuvenece al cantar.
El canto es la mas grande de todas la terapias para quitar las
negatividades del corazón. Cuando uno canta el Nombre
de Dios se destruyen todos los pecados de este mundo.
El canto no solo nos purifica interiormente, sino que también
purifica la atmósfera de nuestro alrededor, llegando incluso
a las plantas, los gérmenes, los insectos. Además, si cantamos
el Nombre con gran respeto y de todo corazón, sin ninguna
expectativa, podemos alcanzar el ser en muy poco tiempo.
Dios vive en todos los lugares donde se canta Su Nombre.
Si Me necesitas has de saber que me podrás encontrar en
aquél lugar donde halla devotos cantando Mi Nombre con amor.
Esta es la grandeza del canto, es un imán que trae el poder de
Dios, cantando el Nombre divino podemos tener a Dios
instantáneamente en nuestro corazón.
Dios tiene dos aspectos:
1) El aspecto trascendente y puro y está más allá del nombre
y la forma.
2) El otro es su aspecto personal que tiene formas y cualidades,
el Nombre es este aspecto personal, el Nombre es el elíxir más
puro, ya que es la verdadera forma del Señor.
El que entiende el misterio del Nombre de Dios...
De la Sagrada Enseñanza de Sri Ramakrishna, pag 77.
(350) El Maestro con frecuencia decía:
"Canta el Nombre de Harí, mañana y tarde, golpeando a la vez
tus palmas, y todos tus pecados y aflicciones te dejaran...
(351) Acaso Su Nombre es insignificante?
Él y Su Nombre son una sola cosa...
... Pero Rukmini tuvo éxito cuando puso en la balanza una hoja
de tulsi con el "Nombre" de Krishna.
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nos interesa su opinión: