Otro día fui a Baghbazar, y encontré a la Madre descansando después del almuerzo. De pronto, como hablando consigo misma, dijo: "Bien, todas están aquí. Pero, ¿dónde está Sri Ramakrishna?" Yo dije a modo de respuesta: "No pudimos encontrarnos con El en esta vida. ¿Quién sabe en cuál de nuestras vidas futuras lo veremos? Pero, para nosotros, la fortuna más grande que hemos tenido es haber podido tocar tus pies". Su breve respuesta fue: "Eso es, realmente, cierto". Quede más bien sorprendida, pues ella rara vez hablaba en esa forma al referirse a sí misma.(CONVERSACIONES DE SRI SARADA DEVI, Pág. 25-26)
- (Gracias por la imagen a la Sra. Jaya Mukherjee)
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